Comerse las uñas es un hábito común entre muchas personas, tanto niños como adultos. Sin embargo, es importante tener en cuenta las posibles consecuencias de este acto, especialmente si llegamos a tragarnos una uña. En este artículo, exploraremos qué sucede en nuestro cuerpo cuando nos tragamos una uña y qué impacto puede tener en nuestra salud.
¿Qué significa comerse las uñas en adultos?
Comerse las uñas, también conocido como onicofagia, es un hábito que puede ser provocado por el estrés, la ansiedad o simplemente por una costumbre adquirida en la infancia. En adultos, este hábito puede ser un reflejo de emociones negativas o una forma de lidiar con el estrés. Sin embargo, este acto aparentemente inofensivo puede tener consecuencias más serias de lo que imaginamos.
¿Qué pasa si te tragas una uña acrílica?
En algunos casos, las personas que se comen las uñas pueden tener uñas acrílicas. Estas uñas están hechas de plástico y son más duras que las uñas naturales. Si te tragas una uña acrílica, es posible que experimentes molestias en el sistema digestivo. Las uñas acrílicas no se descomponen fácilmente en el estómago, lo que puede causar irritación o incluso bloqueo intestinal en casos extremos.
Las uñas se digieren
Aunque nuestras uñas están compuestas principalmente de queratina, una proteína que también se encuentra en el cabello y la piel, no son fácilmente digeribles. El ácido clorhídrico presente en nuestro estómago no es suficiente para descomponer por completo las uñas. Esto significa que las uñas pueden permanecer en el estómago durante un período prolongado de tiempo antes de ser expulsadas o descompuestas.
Comerse las uñas puede causar la muerte
Aunque es extremadamente raro, existe la posibilidad de que tragarse una uña pueda causar complicaciones graves e incluso la muerte. Si una uña bloquea el intestino, puede provocar una obstrucción intestinal. Esta condición puede ser potencialmente mortal si no se trata a tiempo. Además, si la uña tiene bordes afilados, puede causar perforaciones en los órganos internos, lo que también puede ser peligroso.
Me comí una uña y me duele la garganta
Si te tragas una uña y sientes dolor en la garganta, es importante buscar atención médica de inmediato. La uña puede haber causado una lesión en la garganta o el esófago, lo que puede ser peligroso y requerir tratamiento médico.
En general, es importante evitar comerse las uñas tanto como sea posible. Además de los riesgos para la salud mencionados anteriormente, también hay otras razones para dejar de hacerlo. Comerse las uñas puede dañar la apariencia de las manos y las uñas, además de potencialmente introducir gérmenes y bacterias en la boca.
Conclusión
Comerse las uñas puede parecer un hábito inofensivo, pero las consecuencias pueden ser más graves de lo que creemos. Tragar una uña puede provocar molestias digestivas, obstrucciones intestinales e incluso lesiones internas. Es importante buscar atención médica si experimentas algún síntoma después de tragar una uña. Además, es recomendable buscar formas de manejar el estrés y la ansiedad que no involucren dañar nuestra salud.
Preguntas frecuentes
¿Es peligroso comerse las uñas?
Sí, comerse las uñas puede ser peligroso. Puede causar problemas digestivos, obstrucciones intestinales y lesiones internas.
¿Qué debo hacer si me trago una uña?
Si te tragas una uña y experimentas síntomas como dolor o molestias, es importante buscar atención médica de inmediato.
¿Cómo puedo dejar de comerme las uñas?
Existen diferentes técnicas para dejar de comerse las uñas, como el uso de esmalte amargo, terapia de comportamiento y encontrar formas alternativas de lidiar con el estrés y la ansiedad.
¿Las uñas se digieren en el estómago?
No, las uñas no se digieren fácilmente en el estómago debido a su composición de queratina. Pueden permanecer en el estómago durante un tiempo antes de ser expulsadas o descompuestas.
Fuentes:
1. Mayo Clinic